Theodorakis también dejó su sello en filmes como “Serpico”, de Sidney Lumet, de 1973, y “Z”, de 1969, lo cual lo ligó a la obra del director Costa Gavras, acaso coincidente con su historia de activismo político, que incluyó la lucha contra la ocupación nazi en plena Segunda Guerra Mundial y su oposición a la dictadura militar en país -entre 1967 y 1974-, que le valió detenciones, torturas y años de exilio.